El Misterio de Su Divinidad
Luego, el siguiente aspecto de Baba que me golpea con fuerza, es el abrumador e incomprensible misterio de Su Divinidad. Pareciera ser un hombre. Más, hasta el más obtuso puede ver que Baba no es un hombre. Uno Le observa y ve la azul y perfecta calma del cielo profundo. Uno trata de definir Su forma pero sólo puede ver el espacio. Lo único cierto acerca de Él es que nos ama – cualquier otra manera de predecirle o definirle, sería como intentar capturar al viento o la plata de la luz de la luna.
Hasta las historias que leemos sobre el Avatar son sólo fútiles intentos por definir a Swamiji. Se dice que el Ser Supremo y Único manifiesta voluntad de tomar Forma como un objeto dentro de ese mundo de Maya creado por Él Mismo, y que ahí, interpreta un rol humano, sin que comprometa en manera alguna Su Total Subjetividad.
Puede que la razón se sienta satisfecha con tales palabras, construyéndose algún entramado de significado. Mas ese significado sólo podrá ser relativo, en tanto que Baba no es relativo. De modo, que si somos honestos al respecto, terminamos allí en donde comenzamos, enfrentando a un Misterio Divino que es incomprensible.
El Divino Maestro
El tercer aspecto de Bhagavan Sri Sathya Sai Baba que tiene una tremenda importancia para mí, es Baba como Maestro Supremo de los hombres, El que nos guía hacia la liberación – hacia la reunión con Él.
Cada palabra que pronuncia, encierra una lección destinada a beneficiarnos. Baba repite una y otra vez ciertos principios básicos. Tal vez estos principios podrían resumirse en siete puntos cardinales:
Nº 1 -- Sean felices. La ventura es la Naturaleza de Dios expresada en el Individuo y la felicidad es también nuestro deber social. La simple felicidad arraigada en el bien se convierte en un valor para cada uno en nuestro entorno.
Nº 2 -- Sientan siempre que son Divinos. No existe sino Uno Solo. Nosotros no somos diferentes de Él.
Nº 3 -- Permitan que pensamiento, palabra y acción fluyan desde eso Divino que es la naturaleza esencial de uno. Cuán felices nos sentimos cuando emprendemos una acción noble, ¡y cuán miserables cuando nuestra acción es mezquina o detestable!
Nº 4 -- Compórtense con los demás con la misma bondad que usamos para con nosotros mismos, porque a algún sutil nivel de nuestro ser, yo soy ustedes y ustedes son yo, – no somos dos fuerzas opuestas.
Nº 5 -- Despierten con amor, llenen el día con amor, terminen el día con amor. No se trata de que hemos de sentir amor – en verdad, somos amor. De hombres tenemos sólo la apariencia. En verdad, cada uno de nosotros es una llama de amor, danzando extática frente al telón de fondo del maya del Señor.
Nº 6 -- Amen a Dios con todo su corazón. Confíen en Él por completo. Entréguenle su voluntad y su vida a Él. Él es el único refugio. Aunque el dolor y la muerte nos caigan en suerte, sólo en Dios podremos encontrar refugio.
Nº 7 -- Permitan que su mente esté siempre alerta como para ver a través de las apariencias y descubrir la realidad. No permitan nunca que la mente quede atrapada por las apariencias, sino hagan que esté siempre empeñada en una indagación constante: ¿Quién soy yo? ¿Cuál es mi real naturaleza? ¿De dónde vengo? ¿A dónde voy? ¿Dónde está mi hogar y cuál es?
Este resumen de siete puntos cardinales de las enseñanzas de Swamiji lo he enumerado tal como se me viene a la mente, la que es seriamente limitada. Hoy tenemos la inmensa alegría de poder escuchar la Verdad desde lo ilimitado, del Señor Mismo, de nuestro bienamado Bhagavan Sri Sathya Sai Baba. " J. Hislop