Una vez, los dioses imaginaron que eran capaces de obtener la victoria sobre los demonios debido a su propia fortaleza. Cuando estaban celebrando la victoria, apareció ante ellos una deidad, y depositó una hoja de pasto sobre el suelo. Le pidió a Agni (Dios del fuego) que la quemara; pero él no pudo hacerlo. Desafió a Vayu (Dios del aire) a que la levantara, pero él no pudo hacerlo. Provocó a Varuna (Dios del agua) para que la mojara, pero, a pesar de sus mejores esfuerzos, él no pudo hacerlo. Luego, cuando el orgullo de ellos hubo sido pinchado, la deidad les enseñó la Brahma Vidya (la ciencia de Brahman), la cual revela la fuente profunda de toda fuerza. Esta historia no es nada común; Agni es la deidad que preside sobre vaak (el habla), por lo tanto nos dice que el habla tiene que ser humilde, y que obtiene su poder sólo a partir del Principio Universal básico. Vaayu es prana (el aire vital). La humildad en el comportamiento y en la práctica son lo único que importa, especialmente en el Sadhana. |
- Divine Discourse, Aug 17, 1964. |
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