Amados míos, seres en búsqueda de su Ser más elevado, en Luz y más Luz me comunico con ustedes en este día pleno de amor y abundancia, para entregarles un mensaje que los ayude a sanar.

Me preguntarán: ¿pero y si yo no estoy enfermo? Ah! Mis tan amados, las "enfermedades" como ustedes llaman a los estados de energía discordante que afectan sus cuerpos físicos, no suceden sólo cuando se manifiesta una dolencia, porque cuando ya hay un padecimiento de salud es porque durante mucho tiempo se acumularon emociones, que al no ser atendidas, fueron afectando sus cuerpos para llamar su atención sobre algo que les ocurría en el alma y que nunca fue visto ni solucionado.

El dolor, la rabia, la resistencia y sobre todo el miedo los afecta a todo nivel porque desequilibra sus energías y los hace vulnerables, entonces el llamado es a atender esos miedos y preguntarse: ¿a qué le temo? ¿Por qué? ¿Tiene esto alguna solución? Y comprender que pueden superar cualquier temor porque son parte UNO del UNO, si ustedes forman parte de la Fuente del Creador y están convencidos de ello, ¿a qué podrían temer?

El asunto de la emocionalidad terrestre es preciso comprenderlo, porque estas emociones los hacen humanos y eso está muy bien, pero... ¿Qué sucede cuando están descontroladas y se apoderan de sus vidas? Pues que entran en un estado de desequilibrio pleno, dejándose llevar por esa ilusión de miedo y es ahí cuando comienzan a afectarse los cuerpos, bajan su vibración y llega la "enfermedad", es por esto que voy a entregarles una frase muy sencilla que les permitirá permanecer sintonizados con la más alta frecuencia del universo, limpiando los pensamientos, equilibrando las emociones, ayudándolos a ver qué es lo que no está funcionando en armonía y entonces comenzarán a ver la sanación en sus cuerpos y mentes, el Todo, el UNO es la energía primaria que contiene las fuerzas del universo y es desde allí que se sanan.

"Yo Soy la fortaleza en mis cuerpos y mentes integrando la energía universal y sanando definitivamente".

Háganlo desde el corazón, con la certeza de lo que son: seres de amor y Luz perfectos, amados, enteros y partes del UNO.

Yo les amo y bendigo como siempre y desde la Fuente les entrego su poder para sanarse y sanar a otros que lo deseen y lo necesiten. Compartan esta frase, cambien ustedes y ayuden a otros a cambiar. Hasta un nuevo encuentro en la Luz de Dios.

Arcángel Rafael

Medicina de Dios ¡Yo Soy!